Costurero restaurado

 Miércoles 27 de Julio de 2022


Después de muchos meses sin pasar por aquí.  Hoy, creo que enseñaros esta preciosidad merece una entrada bonita.  Os quiero enseñar este precioso costurero restaurado y explicaros un poco su historia y su proceso de restauración.


Eva es una amante de las antigüedades y en especial de los costureros antiguos.  Le encanta comprarlos en los mercadillos de antigüedades y restaurarlos y un día me sorprendió con esta belleza que me regaló

















Vamos a ver todo el proceso con todo detalle.


Cuando lo compró estaba en muy malas condiciones. Las piezas no encajaban no se podía abrir  bien y si se abría ya no se podía cerrar. Tanto el interior como el exterior estaba muy deteriorado, necesitaba una buena restauración.


Sacar el tapizado exterior y dejarlo en el esqueleto e intentar quitar todo el terciopelo rojo fue tarea difícil y muy entretenida.


Las bisagras estaban muy deterioradas, le faltaba alguna pieza que fueron sustituidas por otras.
 

Lijar,  decapar,  volver a lijar y sacarle esas betas tan bonitas que tenia la madera.
 Poco a poco empezaba a tomar forma.





                                       El mango le faltaban piezas y no encajaba nada bien


Después de desmontarlo entero, lijarlo y barnizarlo parece que empezaba a tomar un poco de forma aunque el deterioro de casi toda la estructura le dio " muchos dolores de cabeza" con mucha paciencia y constancia que eso a Eva no le falta...


                         Una vez acabado el exterior empezamos a vestirlo por dentro.

 Elegir las telas fue fácil pues nada mas verlas me enamoré de ellas. Un cuadro Vicky rustico en tonos rojos empolvados y  un lino rustico con unas florecillas me parecieron super bonitas para revestir el interior del costurero.


En el interior de la tapa queríamos poner algo especial y entrañable así que tenia guardada una sabana de hilo antiguo de mi bisabuela,  una sabana amarillenta por el paso de los años que con los sabios consejos de Carmen de aqui@linositesoros logre dejarla blanca. 



Unas puntadas impecables y perfectas.



Y que mejor homenaje a nuestras madres, abuelas y bisabuelas que bordaban a mano con la calma y con esa paciencia que tenían nuestros antepasados, que poner sus iniciales bordadas por ella en el costurero.



Quedo tan super bonito!!!






Que no me canso de mirarlo y aunque no le he encontrado aún un lugar de honor en mi habitación de costura (la tengo en reformas) en breve la tendré acabada y seguro que le encuentro su sitio bien bonito.

Bueno y con esta entrada tan entrañable me despido de vosotras hasta Septiembre ahora a descansar unos días de las prisas y de la aguja. 


 

                                                                  Feliz verano.